A Ejemplo de Cristo

"El bien sabia lo que había en el hombre." - (JUAN, 2:25.)

Si, Jesús no ignoraba lo que existía en el hombre, más nunca se dejo impresionar negativamente.

Sabia que la usura con Zaqueo, con todo, lo trajo de la mezquindad para la beneficencia.

No desconocía la vanidad intelectual de Nicodemos, más le dio nuevas concepciones de la grandeza y de la excelsitud de la vida.

Identificó la flaqueza de Simón Pedro, todavía, poco a poco instala en el corazón del discípulo la fortaleza espiritual que haría de el sustentáculo del Cristianismo naciente.

Ve las dudas de Tomas, sin desampararlo.

Conoce la sombra que habita en Judas, sin negarle el culto del afecto.

Jesús se preocupa por encima de todo, en proporcionar a cada alma una visión más amplia de la vida y en repartir a cada espíritu con eficientes recursos de renovación para el bien.

No condenes, pues, al prójimo porque en el observes la inferioridad y la imperfección.

A ejemplo de Cristo, ayuda como puedas.

El Amigo Divino sabe lo que existe en nosotros... El no desconoce nuestra pesada y oscuro bagaje del pretérito, las dificultades de nuestro presente, lleno de errores y de éxitos, más no por eso deja de extendernos amorosamente las manos.

XAVIER, Francisco Cândido. Fuente Viva. Por el Espíritu Emmanuel. FEB. Capitulo 109.