Vivir En Paz

"... Vive en paz. "­ Pablo (II CORINTIOS. 13:11.)

Mantente en paz.

Es probable que los otros te guerreen gratuitamente, hostilizándote la manera de vivir; entretanto, puedes avanzar en tu derrotero, sin reñir con nadie.

Para eso, con todo ­ para que la tranquilidad te bañe el pensamiento -, es necesario que la compasión y la bondad te sigan todos los pasos.

Junto a la serenidad, podrás analizar cada acontecimiento y cada persona en el lugar y en la posición que les dicen respeto.

Repara, cariñosamente, los que te procuran en el camino...

Todos los que surgen, afligidos o desesperados, coléricos o desanimados, traen llagas o ilusiones. Prisioneros de la vanidad o de la ignorancia, no supieron tolerar la luz de la verdad y clama irritados... Úngete de piedad y penétrales los recesos del ser, e identificarás en todos ellos criaturas espirituales que se sienten ultrajadas o confundidas.

Unos acusan, otros lloran.

Ayúdalos, cuanto puedas.

Pacificándoles el alma, armonizarás, aun más tu vida.

Aprendamos a comprender cada mente en su problema.

Recuérdate de que la Naturaleza, siempre divina en sus fundamentos, respeta la ley del equilibrio y se conserva sin cesar.

Aun mismo cuando los hombres se muestren desvariados, en los conflictos abiertos, la Tierra es siempre firme y el Sol fulgura siempre.

Vivir de cualquier modo es de todos, más vivir en paz consigo mismo es servicio de pocos.

XAVIER, Francisco Cândido. Fuente Viva. Por el Espíritu Emmanuel. FEB. Capitulo 123.