Aprendamos Con Jesús

"Soportándoos unos a los otros y perdonándoos unos a los otros, si alguno tuviera queja; así como el Cristo os perdonó, así hacedlo vosotros también." ­ Pablo. (COLOS ENS ES, 3:13.)

Es imposible cualquier acción conjunta, sin base ni tolerancia.

Aprendamos con Cristo.

El hombre identifica en el propio cuerpo la ley de cooperación, sin la cual no permanecería en la Tierra.

Si el estomago no soportase las extravagancias de la boca, si las manos no obedeciese a los impulsos de la mente, si los pies no tolerasen el peso de la maquina orgánica, la armonía física resultaría del todo impracticable.

La queja desfigura la dignidad del trabajo, retardando su ejecución. Es indispensable cultivar la renuncia a los pequeños deseos que nos son peculiares, a fin de conquistar la capacidad de sacrificio, que nos estructurará la sublimación en más altos niveles.

Para que el trabajo nos eleve, precisamos elevarlo.

Para que la tarea nos ayude, es imprescindible nos dispongamos a ayudarla.

Recordemos que el supremo orientador de los equipos del servicio cristiano es siempre Jesús. Dentro de ellas, nuestra oportunidad de hacer algo constituye solo por si valioso premio.

Olvidémonos, así, de todo mal, para que construyamos todo el bien a nuestro alcance.

Y, para que podamos actuar de esa forma, es imperioso soportarnos como hermanos, aprendiendo con el Señor, que nos a tolerado infinitamente.

XAVIER, Francisco Cândido. Fuente Viva. Por el Espíritu Emmanuel. FEB. Capitulo 163.